La dinámica es parte
fundamental de nuestras vidas, es lo que le da un sentido de movimiento y
dirección; la música como reflejo auditivo de vida también posee estas
características. Dentro de una pieza musical siempre hay algo que suena mas
fuerte, ya sean instrumentos o partes de la misma hay algo que se mueve y te
hace mover.
La evolución tecnológica
cambio totalmente la forma de graba y escuchar música entre ello el formato mp3, la peor tragedia para el
audio digital según Alan Parson uno de los grandes productores de la
actualidad. Y ¿por qué es esto lo peor que le ha pasado a la música? Bueno el
mp3 y los demás formatos digitales son compresión de información en un archivo
de audio perdiendo data y por ende perdiendo audio hasta en un 70%
Esta es una onda de audio de
una canción al ser grabada, el movimiento que vemos verticalmente es la
dinámica, son sonidos fuertes y sonidos suaves, estos sonidos altos crean
distorsión si se tocan a un volumen alto por lo cual se acostumbra
“comprimirlos” ( bajar su nivel a una escala menor) y eso esta bien, es algo
que se lleva haciendo durante los últimos 70 años. Esta es una onda de audio de
una canción hoy en día y es mas conocida como brickwall, haciendo referencia a
una pared de ladrillos ya que porque no hay espacio entre ondas. Como
consecuencia de la perdida de información durante la compresión del mp3 se tomo
como respuesta subir el volumen de todo para que se pudiera oír en cualquier
lado y comprimir los picos para que no crearan distorsión en el audio.
Ahora les mostrare como es
que esto afecta a lo que escuchamos.(reproducir video)
Claramente se percibe el
cambio, si escuchas casi todo lo que se toca pero ya no es tan placentero como
lo era en la versión original. Al momento de comprimir a este nivel no solo
perdemos datos, perdemos también la emoción que esta tiene, le quitamos eso que
se le conoce como el Groove y por un lado menos romántico esto tiene
consecuencias físicas, al estar expuesto a música con esta característica de
brickwall el cerebro intenta descomprimir eso que oímos y una larga exposición
puede causar dolores de cabeza, al estar todo tan alto en volumen nuestra
membrana tímbrica se daña y mas con el uso de audífonos “in ear”.
La
única solución para esta llamada loudness war es crear conciencia en los
consumidores musicales de la calidad en la música que escuchan y donde
encontrar algo mejor, los servicios de streaming deberían poder darnos esa
calidad.